En la cultura colombiana tenemos varios estigmas frente al abuso sexual infantil; desde la fundación queremos compartirlos y crear consciencia que es un tema que por más que tratemos de no tocar por ser cruel o doloroso, es necesario hacerlo para contribuir a su prevención e intervención a las víctimas.
Ignorarlo para evitar sentirnos mal, no implica que no pase.
Mito 1: El abuso sexual infantil no es tan común como se dice.
Podemos pensar que es un hecho que no sea recurrente por no saber de experiencias cercanas o escucharlas constantemente, pero la verdad es que en Colombia se hace un promedio de 43 exámenes médicos al día por abuso; datos sacados del Instituto de Ciencias Forenses de Colombia, estudio hecho por Medicina Legal.
Sin contar los casos que por temor o amenazas no son denunciados.
- En el año 2019 fueron 10.689 las víctimas de abuso infantil.
- Hasta julio de 2020 iban 4.283 niños víctimas de abuso infantil.
- Tenemos hasta marzo de 2021 4.139 exámenes desde medicina legal por presunto abuso infantil.
Mito 2: Las niñas tienen más riesgo que los niños de ser víctimas de abuso.
Es un estigma de género, el pensar que los niños corren menos riesgo de ser victimas de abuso por ser hombres. Lo cierto es que, en el 2020, los menores de edad que fueron victimas de abuso, el 44% eran hombres y el 56% mujeres; dejando estas cifras casi a la par ambos géneros.
Por los estereotipos culturales, que los hombres son fuertes, deben defenderse, si llegan a ser victimas de abuso son señalados duramente, los hombres pueden encontrarse con más dificultades para denunciar y revelar el abuso.
Mito 3. Los agresores son personas desconocidas.
Claro que hay ocasiones donde el agresor es un desconocido para la víctima, pero en la mayoría de los casos se trata de una persona conocida o cercana. Según las investigaciones, se muestra que en el 80% de los casos el abusador era conocido.
Esto también hace que sea más difícil su denuncia, ya que, al conocer al agresor en muchos casos, tratan de encubrirlo por evitar juicios y perjuicios familiares o sociales.
Mito 4. El abuso sexual se distingue por clases sociales.
El abuso sexual pasa en cualquier clase social, desde la familia con recursos económicos mas bajos hasta los mas altos, también pasa en cualquier cultura sin excepción. Muchas veces se tiene el estigma que el abuso se presenta solo en familias disfuncionales, y no es así, el abuso se puede presentar en familias funcionales.
El abuso sexual infantil no discrimina estratos, raza, géneros.
Mito 5. Todos los abusadores fueron abusados.
Puede que algunos agresores hayan sido víctimas de abuso en algún momento de su vida, pero no es un hecho generalizado, que todos los abusadores hayan pasado por ello.
Mito 6. Los abusadores son únicamente hombres.
Las mujeres también han sido agresoras sexuales y pueden serlo. El género no implica que pueda ser o no, un abusador. Se ha presentado de parte de ambos géneros.
El estereotipo cultural de la mujer, como delicada, inocente o inofensiva, llega a crear el estigma que solo los hombres puede ser abusadores y es incorrecto.
Mito 7. Los niños saben que esta mal la situación y lo revelarían.
Decir que todos los niños saben que esta mal, sería generalizar y esta mal, ya que muchos niños no necesariamente saben que esta ocurriendo, no saben que lo que les hicieron no se debe; ya que los agresores se ganan su confianza y los persuaden antes del abuso.
Fuente: Los datos fueron sacados del Sistema Integrado de Información del ICBF, El Tiempo, Prensa y Senado, Infobae y Medicina Legal.
Mitos sobre el abuso sexual infantil por Daniel López Mongay, psicólogo magister en abuso sexual, terapia de pareja, clínica aplicada y el espectro de la esquizofrenia.
Carolina Vargas Marín psicóloga de la Fundación Paula Cristina, prevención al abuso infantil.
